REQUIEBROS ESTILÍSTICOS
Nuevo no es en estas paginas el Sr. Steven Munar, no, sus obras han sido reseñadas y elogiadas puntualmente, ni tampoco es un advenedizo en este negocio, el anglo-mallorquín lleva una luenga carrera en sus zapatos, alcanzando cierta notoriedad con The Tea Servants, lustroso combo de pop rock, y reconvertido ahora en solitario artista acompañado por The Miracle Band. Su último lanzamiento data del pasado año y lleva el bucólico nombre de The Language Of The Birds. Una recomendable colección de canciones, que pasaron un año en un cajón antes de ver la luz, embebidas en la mejor música de raíces americana como reconoce el mismo; “En mi último trabajo me sentí más cerca que nunca de la música de América”, aunque como artista inquieto que es no le gusta ponerse cercas a su creatividad. “También siento un gran amor por la música de los sesenta y setenta”. Una de las características de este último trabajo son las buenas vibraciones que desprende. “Este es mí disco más positivo hasta la fecha” afirma el artista, pero parece que las tornas van a cambiar un poco en un breve lapso de tiempo. “Estoy trabajando en un disco nuevo que espero que pueda estar disponible este otoño, será más melancólico y se llamará Break The Rules, pero en referencia a las barreras mentales”. Un álbum en el que nos sorprenderá con un pequeño requiebro estilístico ya que Steven se considera a si mismo un músico inquieto. “El trabajo que ahora mismo estoy preparando tiene más guitarras españolas, influencias del folk británico y del primer Tim Buckley. Pero tiene mi sello y la personalidad inherente a mi música”. Parece que este nuevo álbum le asienta ya como artista en solitario lejos de la disciplina de un grupo, “No me veo ya en una banda, no hay marcha atrás, solo me veoo a día de hoy tocando en un grupo de música experimental”. De todas maneras a la hora presentar su música sobre las tablas prefiere sentir la calidez de músicos a su alrededor; “Me gusta tocar con una banda a mis espaldas, sentir las canciones vestidas, aunque tengo inolvidables experiencias de tocar sólo con mi guitarra”. Esa calidez que le gusta sentir en la música la demuestra con su amor por el vinilo; “Tener uno de mis discos editados en ese formato sería un sueño” reivindicado así la validez de caras A y B en unos tiempos donde prima la cantidad por encima de la calidad. Quedamos así a la espera de este prometido nuevo trabajo que promete romper algunas reglas mientras de momento seguimos escuchando el armonioso trino de los pájaros.
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